Aquí están, en síntesis vibrantes de vida plena y en maravilloso compendio, todas las sencillas y majestuosas variaciones cambiantes de la naturaleza. El glacial andino, con su yermo de armiño de las nieves perpetuas empenachado de nubes pardas. El monte, la selva tropical y tórrida, con sus quebrachales gigantescos y sus marañas impenetrables, refugio de pumas y de antas. Las planicies ondeantes propicias a las siembras opulentas.