A mediados del siglo pasado, Antonio Balderrama y Remigia Zurita tenían una picantería donde se podían degustar los mejores platos regionales. El local era uno de los preferidos por los artistas salteños.
En el año 1954, sus hijos Daría, Celestino y Juan, decidieron independizarse y fundaron el famoso boliche que se encuentra desde siempre en el mismo lugar.
Nunca imaginaron, quizás, que este local ubicado en calles San Martín y el Canal del Esteco de la capital Salteña, llegaría a ser el "templo del folclore argentino".
La casona fue musa inspiradora de una zamba que cantada por Mercedes Sosa hizo internacionalmente conocido a este local de comidas y folclor. "A orillitas del canal, cuando llega la mañana, sale cantando la noche, desde lo de Balderrama..." El autor de la letra de la zamba Balderrama fue el poeta Manuel J. Castilla y la música inconfundible es de Gustavo "Cuchi" Leguizamón. Don Juan Balderrama sentencia: "el que no conoce Balderrama: no conoce Salta"
En un principio era un simple bodegón, con pisos de ladrillo y techos de zinc. Siempre fue el punto de encuentro de los bohemios de Salta, que se juntaban allí hasta la madrugada y después de sus actuaciones se quedaban guitarreando hasta que el Sol les decía basta!
A orillitas del canal, entre medio de bailantas, suenan las guitarras y el bombo, mientras se canta Balderrama. En el boliche nacieron zambas y entuertos, amoríos y poemas. El sol encegueció trasnochados y bohemios, mientras poetas pedían el almanaque, para reconocer la fecha que se levantaban de la mesa.
En su 50 aniversario la peña más famosa de Salta fue declarada en octubre sitio de ``Interés Turístico'' por el Ministerio de Turismo, Cultura y Deporte de la Nación, a cargo del ingeniero Hernán Lombardi. Esta mención de honor del Estado Nacional se sumó a la resolución del 29 de agosto del Concejo Deliberante de la ciudad de Salta, quien declaró al boliche fundando en 1954 de ``interés Arquitectónico, Histórico y Cultural''.
Hoy mantiene la característica intacta, con consagrados y no tanto, con grupos que quieren llegar lejos, con debutantes absolutos, con algunos que quieren volver y con otros que poco a poco van en conquista del público fuera de las fronteras argentinas. Es el paso obligado de quien visita Salta y para los salteños es la referencia obligada cuando alguien pregunta por las bondades de la provincia.