UN SITIO EN LA LUZ - Zamba
Letra: Jorge Diaz Bavio - Música: Jorge Mlikota
Conservo una postal del corazón
escrita por un sueño sin edad
la rosa que no quiso ser espina
y ahora con un as de pena
juega a cara y seca con mi soledad
la forma del adiós termina
de mentir la historia que no fue perdón.
Perfume de una prenda sin vestir
oculta por el alma en un rincón
después de ver el sol en la ventana
acaba de empezar la vida
escándalo inútil de la sinrazón
la boca sabe a una manzana
y la sangre quiere volver a vivir.
La luna en vos,
sol en mi piel, fuego en los dos
quemando miel, pasión y olvido
donde vas y donde vivo
la isla donde habita el sueño
con un sitio nuevo para nuestro amor,
que el beso vuelva a ser motivo
de encender la hoguera del mismo temblor.
Soy dueño de esta nueva sensación
capricho de una urgente vanidad
las ramas con sus brotes de ceniza
regresan a poblarme el alma
por las calles grises de la realidad
y el sueño va juntando prisa
por latir al ritmo de mi corazón.
Tan joven como el día por brotar
camina por mi cuerpo este temblor
besando con tu boca la alegría
distante como un faro en llamas
con los viejos miedos sin paz del amor
y seguirás por siempre mía
a pesar que nunca te podré encontrar.
https://www.youtube.com/watch?v=_HgzrLmVaZI
HASTA EL FINAL – Chacarera
Letra: Jorge Díaz Bavio - Música: Sergio Nieva
Por el amor que hay en sus ojos
suelo mirar
el azul de los antojos,
que al navegar
pierde el eco de la orilla,
se hace calor,
al soplo y la maravilla
del amor.
Acostada en un suspiro
vuelve a pasar
por el aire que respiro
sin pestañar
y es un ángel de ternura,
luz y color
velándome la ternura
en el amor.
La desnuda mi cariño
hasta la sed
y en su dulce desaliño
me tiende usted
sobre el fuego de su aliento,
sin otra flor,
que el rojo sometimiento del amor.
(Estribillo)
Entro y salgo de su pecho
muriéndome,
resucito trecho a trecho
salándome
en sus besos, boca a boca,
y en su fragor
la carne en celo provoca
un nuevo amor.
(2)
No demando sus amores,
siento su andar,
como un barco de colores
sin otro mar
mi cuerpo donde encalla
su resplandor,
hablándome cuanto calle
en el amor.
Si no hay puerto no hay olvido
ni amanecer
y es la sangre el recorrido
de nuestro ayer,
tierra virgen, agua urgente,
en su temblor,
cayendo salvajemente
en el amor.
Si mañana soy el mismo
guarde la flor
La pasión es egoísmo,
sombra sin luz;
pero al cabo de la siembra
nace la flor,
el fruto de macho y
hembra, es el amor.
MEMORIA DE CARRIEGO
Letra: Jorge Díaz Bavio – Música: Jorge Mlikota
Tomó el viejo tranvío del olvido
y se quedó a vivir en el paisaje
como una cosa más, como otro ruido,
un día de estos volverá de viaje.
Se fue por no quedarse detenido
adentro del infausto personaje,
el epitafio reza: mal herido
por una pena anónima y salvaje.
Escupe gris entre glicinas viejas,
escribe hasta morir dicen las quejas;
detrás del organito viene el ciego.
Comenta el mayoral, mientras la noche
corre en las patas frías de aquel coche,
en donde todavía va Carriego.
LA LUNA POR LAS CALLES – Vals
Letra: Jorge Díaz Bavio – Música: Lito Nieva
Volver de Serenata
al vino de los valles
ahora que retrata
la luna por las calles
la paz de viñas nuevas
abriendo la mañana
y las dulzonas brevas
la buena vecindad…
Los años han pasado
tras la primera cit
a
y el pueblo no ha olvidado
la reja, el son, la cuita,
la voz de los cantores
sobre la arena altiva
y ardientes los amores
haciendo la heredad…
(Estribillo)
Ya está la Serenata
y sobre el escenario
el corazón rescata
su eterno musicario,
una Salta que late
la Bodega Encantada
y todo Cafayate
cantando una canción.
(2)
Con Ríos y el Cochero
quiso cifrar Arnaldo
el alma y el venero
del indio y el heraldo,
cuando el Payo volvía
con todos los cantores
y aquí se quedaría
para abonar la sed…
CHACARERA DEL GUAIPO
L: Jorge Díaz Bavio = M: Roberto Ternán
Como el guaipo en el yuyal
ando volando bajito,
me asiento en el carnaval
pa´ poder pegar el grito.
Yo no sé porque razón
siendo ave de carne dura,
blandito es mi corazón,
cuando el cariño me apura.
Vidita si me querés
vas a seguir esperando,
La lluvia viene después
ahora solo está tronando.
Como el guaipo se volar
en las espuelas del viento
y no la paso tan mal
del modo que yo lo siento.
Libre soy como el que más
en estos montes que habito,
a mí no me han de trampear
los palos del corralito.
Les dejo mi relación
como si fuera un consejo,
uno puede ser halcón
aunque no vuele muy lejos.
Como el guaipo en el yuyal
ando volando bajito...
ya me han de querer ondear
ni bien me eleve un poquito.
https://www.youtube.com/watch?v=GtMNIFScQzM
PAÑUELO DE BAILARINA
L: Jorge Díaz Bavio / M: Roberto Ternán
Otra vez junto a mí
estoy viendo la noche caer
sin tener donde ir,
con un sueño que no puede ser.
Otra vez junto a mí,
la tristeza se ha vuelto mujer.
Para que intentar
detener tu ilusión de volar
si es igual que querer
ver la lluvia pegada al cristal.
Para qué... si al final
desplegando el pañuelo te irás.
Pañuelo de bailarina
siempre anda diciendo adiós
y querer impedir tus deseos de ir
tras de tu pañuelito a volar,
es igual que querer
ver la lluvia pegada al cristal.
Ya no habrá que esperar
que la zamba se encienda de amor
y en el giro final
nos abrace el deseo a los dos.
Solo habrá que saber
que es el viento tu único amor.
La ilusión, esa flor
que marchita el recuerdo a tus pies,
del dolor al amor
ya no hay forma de hacerla volver.
Al compás de tu adiós
van mis sueños deshojándose.
https://www.youtube.com/watch?v=evuVPqo2uPM
LA PROMESA
Letra: Jorge Diaz Bavio
Música: Roberto Ternán
Vuelve palomita,
dame tu vuelo de amor,
puede que reviva
la rama el brote y la flor.
Arbolito triste
se está volviendo el querer,
lo que prometiste
se te olvidó en el ayer.
La promesa es amor sin adiós,
ilusión sin edad,
cuando llora el nido
sin mas que la soledad.
Vuelve palomita,
tus alas no tienen fin
has de andar solita
secándose tu jardín.
Arbolito lejos
del río de tu querer,
solo tu recuerdo
me anda calmando la sed.
LA SERENATEÑA – Zamba
Letra y Musica: J. Díaz Bavio – Yuyo Montes
En el Valle Calchaquí
tomá un vino y alegrate
entonces podrás decir
que el cielo está en Cafayate.
La luna sale a buscar
el duende del remolino
y el sol en el medanal
enciende la luz del vino.
Estribillo
Acaso por ser mujer
me embruja la serenata
y vuelvo por un querer
que me ata y que me desata
guitarra, estrella, ilusión de un querer
se encanta mi corazón
Morena al oscurecer
y rubia sobre la arena
mientras haya una mujer
en Cafayate no hay pena.
A veces salgo a cantar
con el resto que me queda
y me vuelve a cobijar
el poncho de la alameda.
https://www.youtube.com/watch?v=EwZZFNcMRwI