Incursionó en los más diversos campos de la plástica, como el dibujo, la pintura, el grabado, la cerámica y el diseño de tapices, pero sus condiciones naturales la llevaron a profundizar en la escultura, de la mano del maestro Esdras Luis Gianella.

Conjugó las más variadas técnicas con materiales como la arcilla, el cemento directo y el bronce, para plasmar sus formas nacidas del súper-realismo y del informalismo francés marcando la presencia de la mujer en el arte de Salta.

Su pasión estuvo compartida entre la carrera artística y la docencia, desempeñándose como rectora de la Escuela Provincial de Bellas Artes, desde la que bregó por elevar el nivel académico a la altura de los más importantes centros de enseñanza de las artes plásticas del país.

Numerosas obras de Salfity fueron emplazadas en nuestra ciudad, como el mural relieve cerámico en homenaje a Fray Mamerto Esquiú en la fachada lateral de la Basílica de San Francisco y el relieve en bronce del escudo del Séptimo Congreso Eucarístico