Por Gustavo Flores Montalbetti
El renombrado curso de agua que nace en nuestra provincia, fue desde tiempos prehistóricos un eje referencial en lo que hace a asentamientos humanos; pues, sobre cualquiera de sus márgenes es frecuente hallar hoy, alfarería nativa prehispánica. Más adelante en el tiempo concentró hacia una u otra orilla los primeros asentamientos hispánicos, militares y/o religiosos que se fueron construyendo en el intento y acompañamiento por fundar ciudades. En las llamadas tierras bajas, este río siempre constituyó un duro escollo a superar por los viajeros, y con considerables complicaciones cuando era época de lluvias.
El primer dato de quienes buscaron el modo de facilitar el acceso de una margen a otra, consiste en una carta- informe, firmada en el año 1.801 por don Juan Manuel Sierra; entonces Maestro de Posta de la Posta de Concha o Metán Viejo que oportunamente dirigiera al Jefe del Real Cuerpo de Ingenieros. La misiva es el resultado de una verdadera investigación personal acerca de las condiciones del terreno y de los recursos naturales disponibles para la construcción de un puente. En primer lugar sugiere los dos sectores más apropiados para hacerlo, habiendo medido la distancia entre barrancas: “Fui al Paso del Río arriba una legua al estrecho consabido lo medí por una cuerda y con vara española y tuvo el ancho del río de firme a firme de sesenta y seis varas advirtiendo que en ambos lados no tiene peña firme sino tierra movediza (…)”, Para el segundo caso dice: (…) al estrecho de Lumbreras y advierto que la punta del cerro que cito de alguna dificultad tiene de largo una cuadra o algo más. Estando en el estrecho dicho de Lumbreras tiré la cuerda y medí, y tuvo el ancho dicho estrecho de cuarenta y ocho de firme a firme.Además describe el sedimento de los terrenos circundantes y menciona algunos detalles de la geografía. En otros párrafos, establece detalladamente los tipos de árboles que pueden proveer la madera más adecuada para utilizar en la construcción, y menciona que en las cercanías hay piedra de canto y redonda y la presencia de piedra cal para quemar.
En un extenso documento que relata algunos episodios ocurridos durante la Guerra de la Independencia, precisamente en su segundo párrafo dice: “el General Manuel Belgrano luego de descansar y pernoctar en la Posta de La Ciénaga el día 16 de enero de 1.814, (…) el Sr. San Martín fue y encontró al Sr. Belgrano en esta Posta de Los Algarrobos y el Río Blanco (Posta de Las Juntas o de Los Algarobos) como a las 9 de la mañana, siguiendo juntos hasta la Posta de Concha, (…), Yendo de paso ambos al punto de esa angostura en el río del Pasaje llevándose consigo al capitán de artillería don Manuel José Torrens para que delinease un puente levadizo y portátil que debió hacerse en Tucumán, lo que suplió para evitar con 3 gabarras (pequeñas embarcaciones) que mando construir en el paso común de dicho río el Sr. Juan Santos Rubio que suplieron perfectamente; de Concha pasaron a un lado del camino hacienda de Torrens los dos generales donde durmieron y obteniendo Torrens un mapa geográfico de aquellos lugares el Sr. San Martín salió para Tucumán, a los dos días siguientes salió el Sr. Belgrano para el mismo punto, (…)
Quizás una de las pocas cosas que no pudieron conseguir estos grandes de la Patria.
Recién en el transcurso del año 1.926, la Dirección Nacional de Vialidad construyó el primer puente sobre el Río Juramento en el cruce de la Ruta Nacional Nº 34, era íntegramente de madera y tenía 91,70 metros de largo.
