EL BICENTENARIO DE LA   PATRIA
                      Un desafío para la   transformación
                      
a incertidumbre se halla   instalada en el mundo y también entre nosotros. El Bicentenario puede ser, si   nos lo proponemos, una oportunidad histórica de transformar la habilidad de   experimentar la vida, para que el cambio sea verdadero. 
                       
                      El Bicentenario se impone   como un desafío, nos enfrentamos con una noción muy poderosa, la de reunir lo   disperso, la de integrar lo distinto, es decir la de relacionar los saberes y   experiencias para construir una conciencia histórica, cultural, ambiental,   educativa y espiritual, situándonos en el universo de problemas que nos   atraviesan cotidianamente, aceptando los modos de ser diferentes, valorando el   pasado y construyendo para el futuro las herramientas necesarias que den cuenta   del espíritu que nos une.  
                       
                      Agradezco profundamente el   espacio de participación brindado por el Plenario de Organizaciones de la   Comunidad, instrumento orientador para que las distintas Organizaciones de Salta   puedan ejercer, en el marco del Bicentenario, una acción cooperativa y   solidaria. La necesidad de actuar legítimamente en comunidad, exige que la   unidad no sea algo abstracto y lejano, sino algo concreto y cercano con   interacciones y compromisos reales. ¿Cómo construir una ética de la democracia   si no logramos saber de dónde venimos, quienes somos, con quienes transitamos y   hacia dónde vamos?                       
                      Al profundizar sobre estas   cuestiones, no dejo de percibir las dificultades que se presentan a la hora de   participar. ¿Ejercemos un contacto sano con la realidad? ¿Podemos compartir la   experiencia acumulada? ¿Reconocemos nuestros límites y posibilidades? ¿Somos   capaces de aceptar las diferencias de enfoques y perspectivas? 
                       
                      Como miembro de Fundación   Maiz, Organización que trabaja por la unidad iberoamericana, entiendo que el   Bicentenario nos invita a vivenciar nuestra condición humana y manifestarnos   como ciudadanos, dignos y capaces de transformar en forma consciente las propias   limitaciones, poniendo en juego nuestros valores y construyendo con el Otro un   presente motivador y un futuro más próspero. 
                                              
                       
                      Fundación Maiz – Salta 
                      Miembro del Plenario de   Organizaciones para el Bicentenario en Salta 
                      Lia Comitini por el   BICENTENARIO DE LA PATRIA…(29/04/10)