Liliana Leiva se convirtió desde el miércoles en la primera mujer en conducir un colectivo del transporte urbano de Salta.
Liliana no es una improvisada en la conducción. De la mano de su papá aprendió a manejar a los 13 años. A los 17 empezó a hacerlo de forma profesional llevando y trayendo contingentes de jubilados, hinchadas de fútbol y más.
En su primer viaje, viajó a su lado otra futura conductora, Alejandra Flores, quien hace una semana se sumó a la empresa de transporte Saeta.
La incorporación de las mujeres ocurre poco más de un año después de que la Corte Suprema de Justicia hiciera lugar a un amparo presentado por un grupo de mujeres a las que se les negaba el derecho a trabajar como choferes de transporte automotor de colectivos en la provincia de Salta. La principal promotora de la acción era Mirtha Graciela Sisnero.