MIGUEL ANGEL CÁSERES
“JUAN CARLOS DAVALOS”
- SALTA 2004 -
ILUSTRACIONES:
Tapa: ALBERTO
ELICETCHE
Memoria: SANTIAGO JAVIER
RODRIGUEZ
Sentimientos: ALBERTO
ELICETCHE
El Ultimo Poema: ALBERTO
ELICETCHE
Homenaje: ALBERTO ELICETCHE
Diagramación:
PATRICIA KARINA CASIMIRO
Impresión:
CENTRO DE SOPORTE
TECNOLÓGICO
de la Biblioteca Popular “Juan C. Dávalos”
Editorial:
Biblioteca Popular
“Juan Carlos Dávalos”
Domicilio: 10 de Octubre
Nº 551
Tel./Fax. 0387-4314571
E-mail: [email protected]
PROLOGO
Queridos
amigos:
Nuevamente
la poesía vuelve a contactarnos. En este momento especialmente azaroso. Cuando
los fragmentos de las grandes conquistas sociales de los argentinos se
desparraman como desesperadas esquirlas hacia el ocaso. En este mar de lágrimas
donde la desocupación, la desnutrición, el abandono escolar, la ansiedad, la
frustración y tantos otros flagelos embardunados en la miel de la corrupción
constituyen cotidianas manifestaciones de una lacerante degradación que está
socavando el espíritu de los seres humanos y las bases de la nacionalidad
misma.
En
este mar picado, embravecido, donde se agitan olas que desparraman el
vocinglerío de la politiquería de izquierda y derecha que terminan germinando
mensajes en el mismo idioma, lo que acredita la desesperanza. Aquí mismo, desde
este territorio del cual no pude desprenderme, me planto con pluma y
memoria para cobijarme en mi sobretodo villero, para recuperar el
agridulce sabor de todos los llantos derramados por alegrías y penas. Me dejo
ganar por el alborozo de saberme acompañado por algunas páginas de escritos
históricos y estos versos rescatados de
largas jornadas de militancia a favor de un compromiso social y popular que
sabe de persecuciones y secuestros, de agachadas y traiciones, pero también
de lealtades,
de manos cálidas, de amistades férreas, solidarias, sin dobles intenciones.
Después
de la tormenta, o tal vez en plena tormenta, sin pido ni escondidas, sin
concesiones ni revanchas, le extiendo la mano del afecto y me dispongo
mansamente a caminar el último tramo ENTRE EL AMOR Y OTROS POEMAS.
El
autor
- AÑO 1993 -
Ediciones BIBLIOTECA POPULAR
“JUAN CARLOS DAVALOS”
PEDIDO
Espérame en el huerto
de los sueños.
Abrázame contra el espanto
de
los genocidas.
Búscame en el silencio
de
los sembradores.
Transítame con tus manos
llagadas
de tiempo.
Bésame con el más dulce
de
los besos sedientos.
Espérame,
abrázame,
búscame.
Transítame mujer. Bésame.
Entre sueños, genocidas,
sembradores y sedientos.
Al fin y al cabo somos dos;
ya podemos forjar un Hombre Nuevo.
DESTINO
Recorro tu cuerpo lentamente
como abrazo las
dunas en verano.
Me detengo,
pequeños momentos,
en el
enamorado oasis de tus ojos.
Me pregunto,
en el
serpenteante camino,
porqué nos
amamos mansamente
si la vida
nos traza diferentes.
De golpe.
Nos detiene una vertiente,
caudalosa
de lágrimas.
La
cruzamos
en mágica
barcarola imaginaria.
Conscientes
de que al
amanecer
despertaremos
en la
misma costa abrazados.
Así,
día a día,
a pesar de
las distancias,
nos amamos,
en puertos divergentes,
lanzados al
mar de la locura.
MAÑANA
Será
mañana,
una
espantosa mañana.
Cuando
nuestras manos
no
puedan juntarse.
Te
darás cuenta entonces
que la
vida no es cuestión de edades
sino
de trascendencias.
De
pequeñas grandes cosas concretadas.
Que
las sonrisas esbozadas,
los
llantos derramados,
los
sueños compartidos
han
borrado las distancias.
Atrás
quedarán
las
dolorosas inseguridades.
Y en
los ojos de nuestra hija
resumidos
los amores.
En esa
mañana
de
manos separadas,
estaremos
juntos
en las estrofas de la vida.
Muchacha
dulce.
De
labios embriagados,
de
murmullo enamorado,
recógeme
nuevamente
en el día que amanece.
7
HIJOS
Necesito
escribir
a mis hijos.
Mis
siempre pequeños.
Decirles que los quiero.
Que tal vez
sean ellos,
el único acierto.
Cómo
explicar
las
distancias,
los
silencios.
Los
días.
Mientras
la pluma
penetra
en un
tintero de alegrías
y
penas,
confieso
queridos
amigos,
que me duele el alma.
Hoy.
En el laberinto secreto
de los últimos días,
sigo sosteniendo
mi testamento.
Para
mis hijos:
Un abrazo
-
Papá –
TIERRA
Engendras
la
vida
y
escondes la muerte.
Giras
sobre ti misma
como
buscándote.
La
tierra
escondida
en mi zapato
es la
misma
que
cubrirá mi ataúd.
Escribes
poesía
desde
el bulbo
de un gladiolo.
Formas
parte de un adiós
que
busca el cielo
hecho
remolino.
Con la
última palada
te
meterás en mis ojos
obligando
a una lágrima.
A
partir de ese momento
seré
tuyo
y
jugare a las escondidas
entre
los álamos.
EL
COMPARSERO
Disecándose
en el cuero
de una
caja coplera
acordona
con la Albaca
su
alma carnavalera.
Aprendió
de sus maestros
a
vivir con el silencio.
La
Pacha habla en sus brincos
y
acaricia con la mirada.
Hermanado
a la madera
amanece
con su frentera.
Se
desangra lentamente
en
cada lentejuela.
Y el
comparsero sueña...
Que
sería de la vida
si no
existiere
el
carnaval.
La
muerte nos ganaría
el
desafío
pendiente.
No
mirar tus ojos negros
tus
simbas enharinadas.
No
poder ahogarse
en
agua perfumada.
El comparsero.
Al
igual que la serpentina
le
puso color al corso.
El
comparsero.
Al
igual que la serpentina
al
carnaval le entrego su vida.
LAGRIMAS
Hermana
salitrosa
déjame
abrazarte.
Posada
en la palma
de mi
mano
eres
el mas caro rubí
extraído
de la
cantera
de un
hombre.
Te
agradezco Señor
por
darme,
en mi
cobardía,
la
valentía
para
derramar una lágrima.
He
llorado.
Por mi madre,
lo
haré las veces que pueda.
Por
mis hijos,
con
los que estaré siempre en deuda.
Por mis amigos,
en sus
alegrías y sus penas.
Por mis alumnos,
que a
veces quedan sin futuro.
Lágrima.
Dame la mano
otra noche más.
AMOR
Cuando
la muerte
me
atrape
entre
sus garras
heladas.
Quiero
entibiar
mi cuerpo
en el
recuerdo
de tus
manos
amadas.
Recordar
tu mirada,
mujer,
que
aunque lejana,
me
convoca al amor;
remolino
apasionado
donde
nos convertimos en pétalos
de un
rosal enloquecido.
Desandar
los besos.
Madrugadas
de
mimos en silencio
cuando
la vida se expresaba
en
primeras campanadas.
Las
palabras dulces
al
oído susurradas.
Y en
esa oscuridad
mujer
darme
cuenta
que
sin querer
he grabado tu nombre
en la mortaja.
Como
alguna vez
lo he
grabado
con el
frenesí del hombre
enamorado
en el
tatuado corazón
de un
tronco
en
Primavera.
Como
la primera vez.
Cuando
en la corteza
quedó
entre
el murmullo
del arroyo
y el
coro de los pájaros
acompañando
la emoción
y el
temblor de la voz
para
decir: te quiero.
LOS REYES MAGOS
Dejé
la puerta abierta
y no
entraron.
No soy
un niño malo
y sin
embargo no llegaron.
La
cartita decía:
queridos
Reyes Magos
quisiera
que me traigan
una pelota, una
cometa...
y nada
dejaron.
Les
puse agua y pasto
para
los camellos cansados,
ni
siquiera en eso se fijaron.
Al
levantarme pude observar
la
tristeza de mis padres
y a
pesar de que agachaba la cabeza
vi las lágrimas de mi madre.
Que habrán pedido ellos
a Los
Reyes Magos.
Durante
el año,
soy
testigo de cuanto trabajaron
¿Por
qué tampoco a ellos escucharon?
Queridos
Reyes Magos
no
importa que nada hayan traído.
a
borrar la tristeza de mis padres.
15
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
HERMANOS
El
camino ha sido caminado,
y en
ese camino transitado,
como
un naranjo perfumado
se
manifiesta el amor de los hermanos.
Amor
gestado
en días de mimos maternos,
días
que parecen eternos,
por
los recuerdos endulzados.
Peleándole a la vida
sin
blasones ni rencores
regando
una semilla agradecida
florecida
en una mano extendida.
Para
la memoria de los tiempos
hablan
por la boca de hijos y nietos.
Ahogando
en vino las penas
buscan
en el camino
a la
mujer que engendró la simiente
y
quedo convertida en emblema.
A esa
mujer andan buscando
para
entregarle un poema.
Y
cuando la muerte les diga
que el
camino ha terminado,
sonarán
las ocarinas
en
vuelo de pájaros ilusionados.
y en
una madrugada enamorada,
por
ese camino transitado,
regresarán
los hermanos.
EL ULTIMO DESEMBARCO
Navegando
los
naufragios.
Besando
costas,
amaneciendo
en islas.
Tus
ojos me decidieron
a
buscar sosiego.
Soltaron
las amarras
para
el último desembarco.
Para
quedarme en ti.
hecho
caricias amanecidas,
suspiros
transformados
en
loco frenesí.
Sí,
amor,
he
desembarcado.
Ya no
sostengo el timón
entre
mis manos.
Tu me
guías
en
este mar agitado
que
representan tus brazos.
Voluntariamente
he
desembarcado.
Hazte
cargo
de mis
velas,
mi
casco
y mis
pesares.
He
desembarcado,
porque
te amo.
CAE LA NIEVE
Cae la nieve y tu no estás
cae la nieve y te comienzo a extrañar.
No es el frío de la nieve lo que me quiere matar
es el frío de tu ausencia. Amor donde estás.
Porqué tanta soledad.
Porqué no están tus manos mientras cae la nieve.
Porqué me envuelve la noche.
Donde están tus caricias. Amor donde están.
Es tan fría la noche mientras cae la nieve
es tan sola mi vida si me faltas tú
tanta nieve blanquea mis cabellos
camino lentamente hacia el final.
Recuerdo las calles azules.
La primavera vistiendo de verde
el paisaje de nuestros ojos
mientras hoy la nieve me presta
su traje de
muerte.
Mis pasos arrastran nieve
y en esta soledad comienzo a gritar
Amor... donde estás... donde estás
mientras cae la nieve
y nadie acompaña mi soledad.
De pronto, entre tanta nieve
el fuego rompe la noche
ahora hay silencio...
mientras cae la nieve.
Cuando miro hacia atrás
se borran las pisadas
pronto nada quedará
mientras cae la nieve...
y tú no estas.
TÚ
Me has
pedido que te cuente
de mi
lágrima más sentida,
entonces
verás surgir lágrimas
por
esa lágrima perdida.
En el
atardecer de un lejano Diciembre
a la
hora de los juegos infantiles,
el
cielo se cubrió de penas
el
destino se vistió de luto,
la
sonrisa hecha paloma
se
marchaba para siempre.
En esa
lágrima cabalgaron
los
jinetes de la angustia
y
preñaron de llantos las esperas
en las
noches sin luna y sin estrellas.
Para
que nadie viera mi tristeza
me
cobijé en esa compañera
sentí
quebrada el alma
tantas
veces solo, en esa pieza.
Me has
pedido que te cuente
de mi
lágrima más sentida,
déjame
entonces que te diga
de esa
lágrima perdida,
la
derramé una tarde, porque se iba,
la
mujer que me dio la vida.
No me
seques esa lágrima, te pido,
déjala retozar por mis mejillas.
Al fin
y al cabo, después de tanto tiempo,
es lo
único que me mantiene vivo.
EL RAMO DE NOVIA
Las
luces del alba iluminan las campanas
que
tocarán esta mañana anunciando a la pareja
enamorada.
En el
atrio de la iglesia la alegría embarga
a
todos los que esperan a la niña que se casa.
MADRE.
¿Sabías
que tu nieta se casa,
que el
hermoso jazmín florecido
emprende
el vuelo de los pétalos crecidos
ante
la mirada emocionada de tus tres hijos?
¿Me
creerías si te digo que me inunda
el
fervor de una vieja tristeza guardada?
Y
mientras el vals llena de emoción la ceremonia
sonríes
majestuosamente desde el ramo de
novia.
Embriagado
en tu alegría de abuela
me
dejo transportar en las cuencas vacías
de tus ojos humedecidos
y me
elevo en una infinita plegaria
que
mis manos apuntadas al cielo
le
quitan a estos labios resecos de tiempo.
El
vals eleva su últimos sones
danzados
por la pareja enamorada
ya
puedes regresar contenta a tu morada
para
recuperar los silencios y distancias.
Sin
que nadie comprenda la alegría chiquilina
que en
estos rostros envejecidos una novia
dejó.
QUINCE
TERNURA
Con la
dulzura de un pétalo
y la
sonrisa de una ángel,
en un
mundo color azucena
abrazas
tus quince años
niña
cumpleañera.
Suave
y espontánea
como
agua de manantial
trasladas
en tus ojos mansos
el
mensaje celestial
de los
sueños juveniles.
El
poeta encuentra en tu candor
lo que
Dios regala en el paisaje a un pintor.
Deja
muchacha encantadora
que
brote el arco iris de tu corazón
para
convertirte en musa inspiradora.
En el
balcón enamorado
de un
rosal que ha florecido
te
admira mi corazón embriagado,
y los
versos que para ti han nacido
llevan
en sus alas el beso perdido,
que tu
belleza ha transformado
en un
suspiro sin pecado.
Cumples
años niña dulce,
la
plegaria está elevada
para
que mantengas latente la esperanza
que
tus quince primaveras
le
pondrán galas a un mañana diferente.
SEÑOR
Tú que
tienes
la
gracia de vestir al desnudo,
alimentar
a los hambrientos,
saciar
la sed de los sedientos,
abrigar
a los indefensos.
Tú que puedes
apaciguar las ansias
de los ambiciosos.
Deposita
la sonrisa de la paz
en el
tierno rostro de este abuelo
que me
mira.
Para
que germine en el surco
fecundo
de los tiempos
como
un mensaje de tu propia ternura.
Dulce
y bondadoso Señor,
acaríciame
con la mano tierna
de
este hombre, que camina presuroso
por el
florido camino hacia tu morada,
llevando
su mochila cargada
de
angustias y de sueños.
Bendíceme
Señor
dejándome
abrazarlo y agradecerle
en
estos, sus últimos años,
por la
generosidad de sus palabras.
Dame
fuerzas
Para
poder decirle ¡Gracias Abuelo!
Por tu
cariño.
Por tu
paciencia.
¡Gracias
por enseñarme a ser hombre
con
alma de niño!
Y
cuando decidas Señor
convocarlo
a tu huerto,
llámalo
despacio.
Que el
sendero se ilumine con la luna
que la
noche se pueble de cigarras,
los
coyuyos convoquen con su canto
la
bohemia y la locura del poeta.
Y
entonces si Señor, permíteme
que
pueda decirte agradecido
con
esa lágrima que vuela en el pañuelo,
que la
vida ha sido honrada;
y que
Los Últimos Fueron Los Primeros.
28
DUDA
He caminado. Y después de lo caminado
solo he cosechado un pañuelo
humedecido.
He llorado tu partida y después de
haber llorado
quedé convertido en una eterna
despedida.
Tanto
tiempo ha transcurrido.
Desde
este rincón de la nostalgia
pareciera
cierto y no es verdad de que te has ido.
Hay un
poema que grita tu presencia.
Cuando
el canto del jilguero haya callado,
el
frío del invierno mate la flor del duraznero
cuando
me falte el calor de tu mirada
y no
obtenga de tus manos el consuelo.
Entonces
como un humilde pordiosero
andaré
buscando en el camino transitado
el
beso aquel que el tiempo me ha robado
y
consolarme en el recuerdo de lo amado.
Sabré
entonces si decidir lo decidido
padecer
lo padecido
caminar
a veces al borde del suicidio
justifica
el llanto sucedido.
LOCURA Y
DESPEDIDA
Si
amar es desangrarse
en
cada beso apasionado
en
aquel beso que te he dado
amor
por ti me he desangrado.
Si
amar es entregarse
totalmente
en cada madrugada
en esa
rosa que hoy está marchita
el
corazón dulcemente se ha entregado.
Si
amar es esperarse
olvidándose
del tiempo
ha
pesar del sufrimiento este enamorado
fue
espera en llanto derramado.
Si se expresa el amor en un suspiro
en
muchos recodos del camino
aún
sabiéndome olvidado
amor
por ti he suspirado.
Si el
amor es a veces una despedida,
una
lenta agonía desmedida,
por ti
mujer enarbolé en la partida
un
desesperado adiós convertido en poesía.
30
Locura y Despedida
Miguel Angel Cáseres
Y en
este eterno desangrarse
que no
es otra cosa
que la
excelsa voluntad de entregarse
vengo
a reafirmar la loca decisión
de
amar, recordar y esperarte.
Amarrado
a un destino
que se
expresa en un suspiro
convertido
en interminable despedida
que
agoniza en los recuerdos
de
aquellos nuestros días.
TIEMPO
Tantas
cosas han cambiado
desde
nuestro tiempo enamorado.
No son las mismas calles
es menos verde la arboleda
no es la misma tu silueta
que cimbreante mis ojos hechizaba.
La
hora de la siesta
y tus
pasos encantados.
Y yo parado en la esquina
mirándote pasar
acompañado de mi vieja bicicleta
amándote. Lleno de sueños.
El sí.
Las manos.
Las
palabras y los besos.
En esta tarde de verano
he querido volver a recordar
cosas del tiempo que ha pasado
y forman parte de nuestro sentimiento.
Tantas
cosas han cambiado
mientras
sigo recordando dulcemente
nuestro
tiempo enamorado.
Ediciones Biblioteca Popular "Juan Carlos Dávalos"
32
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
ENTREGA
Preguntas
porqué te quiero.
Respondo
simplemente que no sé.
Soy
feliz cuando estoy contigo
amándote
sin buscar explicaciones.
Será
porque te quiero
que tu
ausencia me enloquece.
Cuando
faltas la tristeza cubre mis ojos
y
abrazo las distancias esperando
que regreses.
Eres
como un fruto maduro
que mi
boca busca en las tardes del verano
para
dejarse llevar como las aspas de un molino
y
acompañar el giro de los tulipanes.
Me
gusta tomarte de las manos
para
sumergirme en los atardeceres
sustraerle
al arco iris sus colores
y
mirarlos reposar en tu mirada.
Preguntas
nuevamente
y te contesto
que
solo sé que te quiero,
que
soy feliz de tenerte
que
lamento haberte buscado tanto tiempo
y haber
tardado tanto en encontrarte.
33
Entrega
Miguel Angel Cáseres
Que me
entrego a ti completamente
como
se entrega el río a su cauce
como
el tallo a la rosa vespertina
y el
trigo a los brazos del labriego.
Me
entrego como enamorado
en su vez
primera.
Como
el beso a la niña quinceañera.
Me
entrego y te pertenezco
a ti,
mujer.
En
esta nuestra primavera
me
entrego sin respuestas ni pudores
solo
porque te quiero.
Ediciones Biblioteca Popular
"Juan Carlos Dávalos"
34
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
VERSOS
Hay
versos que nacen
de una
profunda grieta
en
el corazón.
En el
alma misma.
Versos
cargados de sentimientos y
melancolía.
Versos
que tienen tanta tristeza.
Que
caminan despacio, muy despacio.
Con
toda su ancianidad a cuestas,
con la
mansedumbre del tiempo.
El
poeta los espera con miedo
armado
de pluma y tintero
para
entregarse en alguna madrugada
mansamente...
sin resistencia.
Algunos
se quedan para siempre
y nos
recorren dulcemente.
Otros
pierden la batalla y mueren.
Se
diluyen en lejanas galaxias.
Son
tan bellos los versos
cuando
se posan en tus labios
aunque
nazcan en grietas y tengan tristeza
adquieran
galas, candor y pureza.
Por
eso mujer amada
Te has
transformado en versos
versos de amor. Estremecido canto.
Y eres para siempre poesía de mi
tiempo.
35
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
DIVAGUES
I
Quisiera
poder amarte muchacha
como
si fueras la última flor de mi primavera.
Deshojarte
pétalo a pétalo, lentamente,
y
decirte al oído dulcemente,
que en
este lento atardecer de mis días
eres
como el aroma de los jazmines florecidos.
II
No
quiero que le cuentes a la almohada
los
secretos de nuestras tardes
ni
tampoco que delate tu mirada
el
suave mensaje de las caricias hilvanadas.
III
A
pesar de las precauciones adoptadas
no
pudimos evitar en nuestras noches
encantadas
que
una eterna vagabunda posara en nuestros
cuerpos
su indiscreta mirada.
fue
entonces la luna testiga muda y asombrada
de
aquellas hermosas jornadas
que
dejaron para siempre esparcidos los jirones
de un
amor convertido en locura apasionada.
36
Divagues
Miguel Angel Cáseres
IV
¿Sabes
una cosa?
este
día decidió vestirse
de
otoñal melancolía.
cargó
sobre su cuerpo
una
amarillenta tristeza
y
sirvió para darme cuenta
de lo
mucho que te quiero
y que
lo más probable
es que
nunca deje de quererte.
Que
tus besos
me
recorren a pesar del tiempo
que
nada pudo la distancia.
Al fin
y al cabo nuestros sentimientos
se
acunaron en silencios.
Existen
días tristemente grises.
Hoy
fue uno de ellos.
Ediciones Biblioteca Popular
"Juan Carlos Dávalos"
37
- AÑO 2006 -
Ediciones BIBLIOTECA POPULAR
“JUAN
CARLOS DÁVALOS”
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
Cómo se cuenta
lo que ingresa por los ojos
y sacude el corazón.
Cómo descifrar
el silencio milenario
de tus montañas
que emergen como un alarido
en los brazos de tus cardones.
Paisaje desbordado
que se expresa a borbotones
nos trepa desde los pies
rebalsando en lagrimones
y nos deposita blandamente
sobre el multicolorido circundante
que no es otra cosa que la
primigenia
falda de la Pachamama
que sonriente nos observa
desde una Huaca solitaria.
Capullito de lana
florecido entre los cerros
te alimenta la tola
para hermanarte
a la llama.
Ovejita puneña
niña de los tolares
abrigálo al coyita nuestro
calentále sus
pesares.
38
Puna Salteña
Miguel Angel Cáseres
Dale carne tierna, quitále el
hambre
dale tu cuero para armar el parche
tu lana suave pa’ la puiscana.
El te dará sus sueños en los
salares.
Cuando Coquena se enoje,
esparciendo el Soroche
seré llanto brotado de socavones
jirones de viento blanco
cobijado en las apachetas
para convertirme en Copa-Copa
y desparramarme en las Picas-Picas
zambullirme en la Muña-Muña
buscando el amor de mujer morena.
A la hora en que paren las llamas
beberé el llanto de las Jarillas
o tal vez el resto de mi vino
morado
para que un Agosto cualquiera,
renazca en el Chayaco convocado.
Prepararé, con Koymi y Kopa
el homenaje a los antiguos
para que cuando la tierra abra la
boca
me
trague despacito
y en una mañana muy fría
venga a partir la escarcha
con el calor del Sonkoy
que no es otra cosa
que mi corazón enamorado.
Ediciones Biblioteca Popular
"Juan Carlos Dávalos"
39
ENTRE EL AMOR y
Otros poemas Miguel
Angel Cáseres
LA
PARTIDA DEL POETA
Has partido poeta
por eso la rosa
se puso triste.
La tierra,
asombrada,
abre su boca milenaria
para llamarte desesperada.
Las calles,
tus queridas amigas
de tantas madrugadas,
se vistieron de gala
y te dieron su despedida
sin palabras.
Te has marchado querido poeta
sabiendo que nadie podrá consolar
a la mujer, que detrás del portal
esperaba tus versos
para amortiguar la soledad
que dejó un viejo amor
qué, al igual que tú,
un día partió sin regreso.
40
La
Partida del Poeta
Miguel Angel Cáseres
Tu vieja lapicera,
confidente enamorada,
extrañando el calor de tus dedos
sobre su epidermis
se suicidó esta mañana
pero dejó su póstumo mensaje.
Hago esto-dijo-de pura apasionada
si murió el poeta, nada vale nada
pues siempre estuve enamorada
del quimérico amor
que conmigo, en la madrugada
el poeta deletreaba.
Te has marchado poeta
sin avisarme
entonces debo apurarme
si quiero llegar a tiempo
al encuentro final
que tal vez se desarrolle
en este mismo lugar
y puedas entregarme
el poema que para mí
habrás escrito.
Ediciones Biblioteca Popular
"Juan Carlos Dávalos"
41
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
DESAFIO
Parado a un costado del camino
te vi partir como las hojas del otoño
el pañuelo se convirtió en gaviota
y se desparramó por el espacio.
La distancia comenzó a tragarte lentamente
y fuiste un minúsculo punto en el centro
de mis ojos.
Mi corazón, acostumbrado a latir por ti
se sumergió en un pantano lacrimoso
y dejó escuchar un gemido quejumbroso
preanuncio doloroso de un negro porvenir.
Ahora que te has ido
en mis plegarias a Dios le pido
que aprendas a amar como te he amado
y no tengas que llorar como he llorado.
No creas mujer que estoy vencido
todavía quiero intentar el desafío
encender las brasas y ser correspondido
sentir la felicidad del que es amado
y no compadecido.
42
Desafío
Miguel Angel Cáseres
Y queda el pañuelo de testigo
que dejo en este
punto del camino.
Que te amé de la mejor manera que he podido.
Lentamente secaré estas lágrimas
buscaré nuevamente la sonrisa
y aunque arrastre un corazón dolorido
nadie podrá impedir que protagonice mi destino.
Ediciones Biblioteca Popular “Juan
Carlos Dávalos”
43
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
NO ME EXPLICO
Como hacen para vivir sin inocencias
no conciliar
el sueño y levantarse sin utopías.
Caminar sin desafíos
sin palpitar el vuelo de las mariposas.
Los que escuchan todo y se vuelven sordos.
Los que de tanto mirar su entorno se volvieron
ciegos.
Los que nunca podrán comprender lo que
decían
nuestros abuelos:
Miserable no es el que tiene cuenta sin dinero
sino aquel que ha vendido su conciencia.
Pobre no es el agobiado por embargos
sino el que tiene cuentas pendientes con amigos.
No me explico tanta miseria.
Un país rico sin multiplico.
Tantas penurias para nuestros abuelos
convertidos en viejos y sometidos al
desconsuelo.
No me explico porqué tanto olvido,
tanta desmemoria.
44
No me explico
Miguel Angel Cáseres
Qué tienen en su corazón los que deciden.
No les tiembla el pulso cuando firman desatinos
que siembran en el pueblo
desocupación,
hambre y
frío.
No me explico porqué
tanta gente no aparece
mientras otros lo hacen hartantemente.
No me explico tantas cosas...
simplemente no me explico.
Ediciones Biblioteca
Popular "Juan Carlos Dávalos"
45
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
Hermosa niña enamorada
necesitas y mereces ser amada.
Que depositen en tu frente en esta madrugada
los besos que sueñas en tu almohada.
Necesitas que alguien diga que te quiere
te considere luciérnaga
y tomándote dulcemente de las manos
te permita soñar el encanto de las hadas.
Tal vez alguien te ha contado
que el amor es algo tiernamente dulce
ten cuidado niña enamorada, ten cuidado,
la gente por amor vive, pero también sufre.
Cuando veas una estrella vagabunda
cierra los ojos, junta tus manos
y pide tres deseos:
que puedas encontrar tu príncipe encantado
que te amen con el amor que has soñado
que no tengas que llorar
como han
llorado tantos enamorados.
Ahora sigue soñando tiernamente
que nadie te despierte.
ya habrá tiempo para que tu almohada confidente
te diga niña
si has encontrado lo buscado.
Ediciones Biblioteca Popular
"Juan Carlos Dávalos"
46
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
Estarás pensando
que de aquel
amor no queda nada.
estarás pensando
que aquel amor
no existió jamás.
Embriagada de soledad
estarás mas que convencida
que aquella relación te produjo tan profunda herida
que no volverás a enamorarte nunca más.
Y en estas horas que nos separa tanta lejanía
quiero elevar una pregunta que suena a letanía
preguntarte a ti mujer, amada mía,
si en las tardes del otoño no te embarga cruel
melancolía.
Si cuando amanece no falta una figura en tu ventana
Si cuando anochece no extrañas de mi tabaco su
fragancia
si al
escuchar melodía compartida no es cruel ironía
que derrames
lágrimas y lamentes mi partida.
Si fuera así. Déjame que te diga las cosas a mi
modo.
De nuestro amor nada se ha perdido. Ha quedado
todo.
Ha existido siempre y ha pesar de las heridas
déjalo convertido en letanía. Y aunque lo llores
envuelta en melancolía. El amor vive en nosotros
amada mía.
47
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
ARTABÁN
Cuentan ancianos memoriosos
que Melchor, Gaspar y Baltazar
eran reyes poderosos.
Pero también cuentan estos ancianos
que hubo un cuarto rey llamado Artabán
hombre solidario y bondadoso.
Que después de mucho tiempo
y caminos transitados
los otros a Jerusalén llegaron.
En el pesebre de Belén
veneraron al Mesías, es decir el esperado.
Una estrella fue testigo
del oro, incienso y mirra que obsequiaron.
Artabán, el cuarto rey, fue ausencia sin olvido.
Cuentan que en pueblos y caminos
anduvo demorado.
48
Artabán
Miguel Angel Cáseres
Inundaciones, pestes y sequías
en su camino se cruzaron
consolando a sufridos y necesitados
los regalos para el niño fue dejando.
Cuando llegó al pesebre el nacido había partido
Herodes trazó el camino hacia el exilio
a partir de entonces fueron treinta largos años
que este rey
anduvo transitando huellas del
destino.
Sembrando la palabra, prodigios y milagros
con su angustia, caminando y preguntando
como dos paralelas trazadas en la tierra
teniendo en común el amor al ser humano.
Pero hubo un día...
un día aciago...
en que los caminos se juntaron.
Artabán llegó envejecido, casi temulento,
embebido en lágrimas se postró humildemente
juntó sus manos, alzó la vista y pidió perdón.
Fue un clamor desesperado, casi lacerante,
pidió perdón por haber llegado tarde
y a pesar de sus deseos, con alforjas sin
presentes.
49
Artabán
Miguel Angel Cáseres
El hijo de Dios ya no era un niño, era todo un
hombre
bajó la vista y dijo: ...levántate Artabán
no llores tu pobreza y mira mi riqueza
si tuviera que contar bienes con tus ojos
diría que obtuve una cruz de madera,
tres clavos, un
corazón sangrante
y esta
oprobiosa corona de espinas.
Sin embargo la palabra ha germinado
en tu ejemplo de repartir tibieza en manos
extendidas
de invertir tu tiempo en aquellos que gemían
en el cariño y la oración de éstos que me miran.
Levántate y camina. Serás el sembrador de la
sonrisa.
Y cuentan los ancianos memoriosos
que Artabán marchó por caminos del olvido
y que en
lejana celebración de Reyes Magos
un niño de pies descalzos pero de memoria
plena
se acercó furtivamente a sus zapatos
y depositó un poema.
Ediciones Biblioteca Popular
“Juan Carlos Dávalos”
50
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
MISTERIO
La
noche tiene silencios,
ruidos
y luces,
sombras
aposentadas
y
otras deambulantes.
Abriga
magníficas locuras circunstanciales
y
nostálgicas esperas.
También
tiene sus fantasmas
que la
rondan, la miman y la visten
con
las galas de las mujeres solas.
La
noche a veces es tan oscura
que no
puede mirarse el rostro.
Entonces
se imagina como una dulcinea
y sale
a recorrer los caminos
buscando
un príncipe valiente
que
sea capaz de proponerle
una
vida diferente.
A
veces debe esconderse de la luna
que quiere
descubrirla
con la
complicidad de los tucu-tucu.
Por
eso al igual que los Reyes Magos
siempre
partirá diez minutos antes
que
despierte el dueño de los zapatos.
Ediciones Biblioteca
Popular "Juan Carlos Dávalos"
51
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
COPLAS
Donde
se enangosta el río
cerquita
del tipal
tiene
una cita la luna
con la
flor del ceibal.
Bajando
pa’ Cachi Adentro
sonriente
y montada en ancas
han
visto una buena moza
meterse
en la salamanca.
Échame
agüita i’pomo
mejor
si es perfumada
de
premio te guá’ esperar
cuando
bajes con la majada.
Decime
chinita linda
porque
ti hacís de rogar
te
ofrezco muchos besitos
sin
que tengas que pagar.
No
tiendas la cama niñita
hoy no
la vas a usar
saldremos
todita la noche
a
celebrar el carnaval.
Rumbiando
pal’ lao de Escoipe
me han
visto pasar al trote
con
una china en las ancas
y la
sonrisa hasta el cogote.
52
Coplas
Miguel Angel Cáseres
Cuando
la luna se esconda
en los
cerros del algarrobal
vendré
a buscarla niñita
para
hacerla suspirar.
Después
de tantos festejos
regreso
hasta su lecho
con
flor de amancay en las manos
y
muchos versos en el pecho.
Anda
buscando la copla
la
garganta del cantor
para
transformarse donosa
en
mensajera de amor.
Alajita
chinita linda
no te
me hagáis de rogar
mas
tarde andarás pidiendo
y ya
no tei’ querer dar.
Pobre
la niña cantora
murió
al amanecer
dicen
que murió de pena
no la supieron
querer.
Si una
mujer quiere un hombre
y el
hombre quiere mujer
si los
dos andan queriendo
amanecerán
queriéndose.
53
Coplas
Miguel Angel Cáseres
Canta
el que tiene penas
canta
hasta despenar
el que
anda penando canta
cantando
hasta alegrar.
El que
tiene alegrías canta
de
puro alegre nomás
así
cantando el alegre
con su
alegría andará.
Mujer
airosa es la zamba
que
identifica este lugar
es
danza primorosa
y lo
está invitando a bailar.
La
niña con su pañuelo
anda
queriendo enamorar
y
mientras baila la zamba
en
sonrisa se convertirá.
Tu
falda tirada al viento
parece
ola de mar
mezclada
con tu mirada
suspiro
del carnaval.
Déjame
rozar tus trenzas
que se
arquean al bailar
quiero
sentir cosquillitas
que me
hacen corcovear.
54
Coplas
Miguel Angel Cáseres
Tu
sonrisa picarona
en
media vuelta me tirás
tu
pañuelo me anda diciendo
que
muy pronto partirás.
Rojizos
son los labios
que me
hacen sonrojar
si me
dieran un besito
me
harían desmayar.
Luce
la zamba en el patio
el
aire se pone dulzón
y como
miel de lachiguana
el
paisano anda querendón.
Me
anda picando el cuerpo
como
brotao de sarpullido
cuando
tocan chacarera
no
recuerdo mi apellido.
Ediciones
Biblioteca Popular "Juan Carlos Dávalos"
55
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
Cuerpos
arqueados,
dedos
tintineantes
miradas enardecidas
ojos chispeantes
gira
el amor con gestos galantes
baila
el corazón con tu ritmo alucinante.
Dejáme
chacarera me derrame enloquecido
dejáme
que florezca en un piropo enardecido
que
resbale despacito por tu cuerpo
somnoliento
y
amanezca enamorado, machadito y sin
aliento.
Que
pueda consumirte como breva mañanera
zapateando los estertores de mis penas
y como
un jadeante leopardo alucinado
me
deje reposar en los pliegues de tu falda
enharinada.
Dejáme
chacarera, niña bien amada,
declarar abiertamente al final de la jornada
lo
mucho que te quiero y en carta perfumada
te
diga que te espero en pasión resucitada.
56
La Chacarera
Miguel Angel Cáseres
Y
ahora que te bailo entregado totalmente
me
siento parte de tu cuerpo quebradizo
queriendo
decirte un adiós que ya no puedo
pues
soy voluntaria víctima de tu hechizo.
Déjame
chacarera que te beba lentamente
sorbo
a sorbo, giro a giro, grito a grito.
Que te
abrace en cada giro
hasta
convertirme en una de tus hebras
y
cuando el sol de la mañana
me
rescate jadeante y amanecido
cuente
la lujuria de saberte mía para siempre.
Ahora
desparrama tus sones.
Ebria
de ritmo enloquecida
quiero
irme lentamente hacia el cielo.
Después
de haberte conocido
Y
en la tierra que levantas
quedarme
convertido en remolino.
Ediciones Biblioteca Popular "Juan Carlos Dávalos"
57
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
AQUELLA
VEZ
Fue
una vez cuando el corazón latió enloquecidamente
como
un torbellino burbujeante de alegrías
como
un presidiario que pudo romper las cadenas
para
vestir mis ojos
con un
paisaje color de lapachos florecidos.
Fue
esa vez cuando pude conocer el color
que
les brindan paraísos y jazmines
a los
amores nacidos en ambientes vespertinos.
Fue
una vez, me dije tantas veces... despacio...
muy
despacio para no sobresaltar el cansado cuerpo.
También
hubo tiempo transcurrido, sin embargo
esa
vez todavía se recuesta en la memoria
y
retoza juguetonamente en días sin olvido.
Ocurrió
para recuperar la sonrisa y enarbolar miradas
tiernas.
Desde
entonces ya nada se parece a nada
todo
es completamente diferente, complejo y
exultante.
Nunca
mas los días dejaron de portar desafíos.
El
sol, los trinos, la lluvia, las flores, los truenos
adquirieron el misterio propio de las jornadas
inesperadas...
fue una vez... hace tiempo...
cuando
te conocí, mujer amada.
58
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
JUANCITO
DE EMBARCACION
Solo
con su pito. Detrás de las monedas
cabalgando
su día, amanece Juan Vera
Es tan
pobre el andariego que ni comparsa tiene.
Ni
princesa que lo espere. Solo su cuerpo lo
sostiene.
Tan
solitario es su destino,
que ni
sombra le ha quedado
Tan
Juancito es el pedido
que
hasta los grillos han callado.
Es
aroma de albahaca desparramado en el camino
fruto
de Yuchanes en bagualas florecidos
incienso
salamanquero, gemido pimpinero
cascabel
de los disfraces, cacique de si mismo.
Busca
un carnaval que dicen fue su amigo.
Tiene
penas, no lo niega, le ha confesado al vino
quisiera
ser pañuelo para buscar el olvido
y
alejarse de la tierra convertido en remolino.
Es
Juancito el que camina.
Cantando
de pueblo en pueblo
con su
Embarcación a cuestas
y su
llanto sin consuelo.
59
Juancito de Embarcación Miguel
Angel Cáseres
Muy de
noche es el regreso.
Una
mujer esta en la puerta
es por
su canto y sus monedas
que su
madre esta despierta.
A la
vera de un camino Juancito es una estrella.
Es el
indio solitario que canta
mientras
la muerte espera.
Es
rayo e sol cuando amanece en los pagos de Orán
cono
de sombra con su caja
cuando
marcha a Pichanal.
Pájaro
errante del carnaval,
bailando
en Tartagal
y en
el crecido marrón de su Bermejo
lo han
visto regresar.
Tan
Juancito y solitario el indio de Embarcación
hoy lo
llora, la memoria y la nostalgia popular.
Dicen
que camina despacio, dele y dele cantar
Dicen
que llora de a tranquitos por su amigo
carnaval.
60
Juancito de Embarcación Miguel
Angel Cáseres
Ha
partido... ya se ha ido. Y sin embargo
no lo
olvidan
Quiso
encerrar la luna en un capullo de arena
Solamente
para soltarla cuando tu sueltas tu
cabellera.
Que
tristeza tiene el que abunda en riqueza,
no
pudo comprar nunca los blasones de nobleza
que
el pueblo le dio a Juancito a pesar de
su
pobreza.
Ediciones Biblioteca Popular
"Juan Carlos Dávalos"
61
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
Pido
permiso señores, voy a ponerme de pie.
Quiero
elevar un mensaje
que
tiene mucho de homenaje
Para
un luchador de fuste, dirigente gremial
en la
huelga mariscal y paladín de la amistad.
Sabedor
que al mañana diferente
se lo
forja no solo trabajando
sino
también apretando los dientes.
Puso el pecho junto a Di Pasquale y Ferraresi
soportando
allanamientos y persecuciones
que
forjaron su compromiso e ilusiones
de ver
un movimiento obrero organizado.
Testimonio
mismo de la sangre derramada
por tantos
compañeros asesinados,
hoy
convertidos en campanadas...
en una
clarinada... un verdadero canto
ilusionado
que
nos da fuerzas para andar de calle en calle
codo a
codo, aunque vengan degollando,
sabiendo
que no hay celda ni metralla
que
mate la conciencia de un trabajador
movilizado.
62
Semblanza de un Grande Miguel Angel Cáseres
Un
dirigente combativo también sabe
que
una conciencia de lucha
no
solo se alimenta de puños cerrados,
de
lágrimas derramadas y penas cotidianas.
Dictadura-noche-ausencia-grito-pena-lucha
¡siempre
adelante!
Camino
recorrido, sinsabores cosechados.
Compañeros
que se quedan, otros que se suman.
Madrugadas
que desangran, alborada que se
espera
el
mundo que nos mira, Malvinas que amanece
las huelgas que se suman,
democracia que
florece.
América
y Europa supieron valorarlo
reconociendo
trayectoria y experiencia.
Como
la cosa da para largo, acortar es la cuestión
se
eleva entonces una última reflexión:
les
presento a un dirigente digno de admiración.
Siempre atrás a la hora del aplauso
y
siempre adelante cuando se decidía un paro
sí se
lo enseñaron Digón, Millán y Raimundo
Ongaro.
63
Semblanza de un Grande Miguel Angel Cáseres
Convirtió
al sindicato en su templo
convencido
que la organización vence al tiempo.
Se
acaban las palabras y la emoción se multiplica.
Vamos
compañeros, elevemos el grito
¡Hasta la Victoria Siempre!
Querido militante HORACIO PEDRO MUJICA.
Ediciones Biblioteca Popular “Juan
Carlos Dávalos”
64
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
Para María Asunción Pastrana,
tamalera, que todavía anda
recorriendo las calles de la ciudad.
Bambolea
su cuerpo
sobre
su caballo cansado
y en
cada grito que pega
revive
parte de su pasado.
Las
calles la miran asombradas
bajar
desde las quebradas
ofreciendo
verduras frescas
y una
sonrisa iluminada.
Si
parece fantasma de otros tiempos
si
parece fantasma cabalgante
la
arganera y sus árganas
es un
cuadro alucinante.
Ediciones Biblioteca
Popular "Juan Carlos Dávalos"
65
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
EL VUELO
DE LA PALOMA
Vuela
paloma, vuela.
Eleva
el vuelo ...buscando el infinito
mientras
alguien apunta desde abajo
tratando
de justificar su aburrimiento
Vuela
paloma, vuela.
Transfórmate en mensaje del olvido
aléjate de la
miseria del que apunta
y
quiere convertirte en capullo herido.
Vuela,
paloma vuela,
no
mires hacia abajo
donde
el que apunta solo busca
los
aplausos y un trofeo
que
acrediten su propia muerte .
Ediciones Biblioteca Popular
"Juan Carlos Dávalos"
66
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
Origen,
destino. Misterio y camino.
Compañera.
Dadora de vida. Madre y guía.
Desde
el inicio de los tiempos,
en la
ancianidad de tu rostro nos miramos,
te
veneramos para florecer junto al maíz
y en
cada grano desparramarnos por las
sementeras
para
que en el agua regadora de los surcos
vaya
germinando la chicha festejante
que
hará que en nuestro propio agosto
me
acaricies transformada en Huayra- Puca
y por
las noches, cuando busco el regocijo del
descanso,
me
acompañes dulcemente convertida en
Mama- Quilla.
Te
brindamos las plegarias Pacha- Mama
esta
danza, este canto gozoso y peticionante
para
que se multiplique la alegría y se mude la
tristeza.
Para
que nuevamente los tacus convoquen a
la Tacu- Pallana.
67
Pachamama
Miguel Angel Cáseres
a ti,
que eres madre de las cosas.
Desde
esta boca abierta en tu epidermis
nos
dejamos transportar por el Chayaco
y en
el retumbo implorante de La Tinya
me
penetras en flechadas y en los dorados
rayos del Inti.
Te
dejo mi acuyico y mi cigarro.
Pacha, dame paz.
Mama, dame trabajo.
Pacha, dame verdad.
Mama, dame justicia.
Kusiya
– Kusiya - Pacha -
Mama
Ediciones Biblioteca Popular
"Juan Carlos Dávalos"
68
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
Jugando,
jugando,
en
nuestra niñez,
aprendimos
a jugarnos.
Decían
nuestros abuelos
Jugáte,
si tenés porqué,
no te olvides que por jugarse
fue
Cristo al madero.
Yo he
visto jugarse
a un
pueblo entero
jugarse
por ideales
arriesgando
el pellejo.
así
jugando, jugando
lo
mandaron al matadero
En
nuestra niñez
aprendimos
a jugarnos
jugando...
jugando
Ediciones
Biblioteca Popular "Juan Carlos Dávalos"
69
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
FANTASMAS
Por
esas calles, otrora llenas de gritos
deambula
el silencio.
Por
esas calles, ayer colmadas de multitudes
deambulan
los fantasmas.
Fantasmas
de un país desaparecido
como
una verdadera Atlántida
donde
los jóvenes cantando
lucharon
por sueños e ideales.
Fantasmas
que obligan al insomnio
pues
nos gritan que el Minotauro
ha
quedado suelto en el laberinto.
Muchedumbre
fantasmal
rueca
en mano, hilan tejidos
con el
hilo de Ariadna
denunciando
a Dédalo
a la
vuelta de la pirámide.
Para
que la niña, vejada y desnuda
gane
nuevamente esas calles
grite
su nombre y diga
que se
llama justicia.
70
Fantasmas
Miguel Angel Cáseres
Es
deseo que llegue un Teseo,
por
esas calles, otrora llenas de gritos
por
donde deambula el silencio.
Por
esas calles,
ayer
colmadas de multitudes
deambulan
los fantasmas.
Ediciones Biblioteca Popular "Juan Carlos Dávalos"
71
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
TRINOS
trina que trina con voz cristalina
el ave que en la rama
le pone música a la nueva jornada.
Entonces todo cobra vida
como el despertar de una enorme serpiente.
En el desorden del cuarto
queda dormido el sentimiento.
La ambición del hombre gana la calle.
En un portafolios se encierran las utopías
y un semáforo rojo impide el paso
a la esperanza.
Una mano extendida hablará de la limosna
y un rostro indiferente hablará de la miseria.
Mientras tanto, en la diáfana mañana
trina que trina con voz cristalina
el ave que en la rama
le pone música a la nueva jornada.
Ediciones Biblioteca Popular
"Juan Carlos Dávalos"
72
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
EL
PONCHO
Para los que
saben de caminos
es un
rectángulo colorido
que desde el
tiempo de los antiguos,
que son tiempos primigenios,
transporta
un mensaje de amistad,
amistad
sincera, sin doble intenciones,
porque cada
hebra de lana es símbolo de lealtad.
El poncho es un alarido montaraz
legado de
nuestros mayores
nacido de
las Puiscanas
desparramado
por mil rincones,
en busca de
libertad.
Hijo de los
telares,
eco de los
cantares.
Hermano de
las guitarras,
confesor de
soledades.
Testigo de
los Fogones,
compinche
de sofocones.
El
Poncho
Miguel Angel Cáseres
La noche lo
viste de amores
con
caricias, suspiros, y otras tentaciones.
Los días lo
transforman en comandante de
sinsabores.
Galante y
servicial cuando mandan las
ocasiones
chúcaro y
bravío, cuando hablan los facones.
El poncho,
al igual que la sombra,
tiene una
noble misión
acompañar a
su dueño,
en todo
lugar y ocasión.
Ediciones Biblioteca Popular
“Juan Carlos Dávalos”
74
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
MIENTRAS LLUEVE
Llueve.
Y el tejado
adquiere su mejor brillo.
La mañana se
llena de quietud
y en las
cercanías un Quitupí eleva su mensaje
colorido.
Llueve.
El espacio es invadido por un gris plomizo
hay un dejo
de nostalgia en el ambiente.
Todo tiene el encanto propio de un hechizo.
Llueve.
Y nuevamente, como un hada inesperada,
apareces tú,
con mojada cabellera,
con sonrisa
de bella mujer enamorada
y en esos
ojos que transportan tu mirada
recupero el
regocijo y el color de la esperanza
simplemente porque en ti vive una
eterna
primavera.
Llueve.
Y me dejo
transportar como una gota en el
torrente.
Llueve.
Y mientras me inunda
esta gris melancolía
dejo que me
desborde el color de simples cosas.
Llueve.
Y en el
humedecido testimonio de la vida
he dejado
de sentirme solo.
75
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
DICEN QUE...
El Río Arenales se ha incrustado para siempre
en
mis ojos.
Que la chicha y el
vino hace rato que han reemplazado
mi sangre.
Que mi corazón no es otra cosa que una caja chirlera
que
bate el parche
al compás de los brinco de ese comparsero cantor.
Dicen que cuando escucho una zamba me corcovea
la memoria
para que mis pies, desnudos de tiempo,
salgan a caminar
la epidermis de este territorio que me pertenece
porque así fue escrito en un petroglifo escondido en
mi pecho.
Dicen que si alguien resbala una baguala se me
erizan los pelos
y cual lobizón al que le han robado la luna
desciendo los peñascos de mi propia angustia
y me convierto en un alarido desbocado, grito macho,
que aunque tenga un cuatro de copas dice quiero.
76
Dicen que...
Miguel Angel Cáseres
Que si un changuito
pata pila se me cruza en el
camino
se disparan las esquirlas del guerrillero
y entre su barriga hinchada y su mirada sin destino
prefiero ser la piedra que dispara el piquetero.
Que si me acarician
me pongo tierno como un perrito
faldero
y cuando la quena
abre camino al pastiador y su
majada
soy esa florcita que a los lejos se divisa entre los
cerros
o el poleo que aromatiza las tardes del que ha
cumplido la jornada.
Dicen que soy la honda preparada con arquito de
Sereno.
Trompo zumbador que en la troya arma el desparramo
tera que en el triangulo juega su destino
barrilete con farol transportando mensajes de amor.
Que me gusta
corretear los tucu-tucus por los
baldíos
ponerle zancadillas a los distraídos y abribocas
hacerle cocacheras a los que se mandan la macana
y hacerme el mutulito cuando la mano viene cambiada.
77
Dicen que..
Miguel Angel Cáseres
Que me gusta colarme
aunque tenga pá la entrada
hacer tumbaloyas y correr la salvadera
jugar a las escondidas si la que se esconde es buena
moza
prenderme en las truqueadas cuando está que arde la
cosa.
Dicen que camino
despacito, sin testigos ni
alharacas
las angostas calles de mi Salta, niña primorosa,
mientras bebo el último sorbo de un vino que se acaba
intentando el homenaje que le cuente de todas estas
cosas.
Dicen que me ando
despidiendo a cada rato
desde todos los rincones y en cada uno de los gestos
al fin y al cabo dicen cada cosa que antes se arme el
zafarrancho
prefiero que cada carancho raje pa´ su rancho.
Ediciones Biblioteca Popular “Juan Carlos Dávalos”
78
ENTRE
EL AMOR y Otros poemas
Miguel Angel Cáseres
LOS AÑOS
cargados de presagios
despacio, casi sin apuro,
aparecieron de golpe
con su carga de tiempo.
Resbalan sobre la espalda encorvada
y juegan a las escondidas con las arrugas.
Tienen un sonido de clarín que anuncia Paz
sobre pasiones y barricadas doctrinarias.
De puro traviesos saltan sobre las hojas
de los almanaques
y de tanto en tanto adornan las mejillas
con una lágrima
que transporta el mensaje de ausencias añoradas
y se iluminan con la
luz de velas cumpleañeras.
Generan sus crías que se nos trepan de a cococho
para que nuestros pasos adquieran las dulces
lentitudes
que como campanas angustiosas
anuncian la cercanía de la despedida,
pues los años, como las golondrinas,
recorren inmensos cielos y saben de amores
y desconsuelos.
79
Los Años
Miguel Angel Cáseres
Se nos escapan de entre los dedos
como agua juguetona y cristalina
dejándonos nostalgias de tiempos y lugares
la mansedumbre de nuevas miradas
el dolor de un camino sembrado de olvidos
la rabia de salarios insuficientes y desagradecidos
la tenaz persistencia de las injusticias
y el desgarro de saber que hablar de Patria
representa casi un sin sentido.
Como un farol encendido
los años nos andarán acompañando
en el último tramo del camino.
Hasta que nos perdamos, allá lejos,
como un último punto de luz
que se apagará para siempre
en la hermosa musicalidad de un suspiro.
Ediciones
Biblioteca Popular "Juan Carlos Dávalos"
80
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
RETIRADA
Emprendo la retirada.
De mi mismo...
de las cosas...
si pudiera dejar mi sombra.
Para buscarme en la distancia.
y preguntarme
en que recóndito lugar
se ha escondido
el que inocente jugaba
sin conocer
el filo mortal de la palabra.
Emprendo la retirada.
con el alma vacía
llevando casi nada.
Tal vez no merezca siquiera
el dulce calor de tu mirada.
Ediciones Biblioteca Popular "Juan Carlos
Dávalos"
81
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
LA MUERTE
Milenaria.
Esbelta.
Con códigos a cuestas
esquivando escollos
siempre resuelta.
De
fina silueta
Avanza...
avanza...
no se arredra.
Poco le importa
que
nadie la quiera...
que
pocos la busquen...
que
todos la esquiven...
Sonriente
se
acerca...
se
acerca...
Me parece
que está tocando a mi puerta.
Ediciones Biblioteca Popular
"Juan Carlos Dávalos"
82
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
MAMA JOSEFA
Fue madurando lentamente
el tiempo de su existencia.
Se fue quedando dulcemente
como símbolo de cosas importantes.
Llegado el momento
comenzó a deshilvanar la vida,
urgar el monedero del tiempo,
el inventario en busca del
regreso.
Fue ternura sentada a la mesa del
mediodía
desparramando las hojas de su
memoria.
Para la vida fue gran señora.
para el poeta gaviota peregrina.
Caminaba muy despacio
para retardar la despedida.
83
Mamá Josefa
Miguel Angel Cáseres
En el suma y saldo de vida bien
vivida
mientras preparaba maletas para la
partida,
se dio cuenta de ausencias muy
queridas
y dicen que la vieron derramar
una lagrima dolorida.
Se fue buscando los rosados
pétalos
de la tarde.
Y cuando la esquela necrológica
anuncio que Petrona Josefa Díaz
había encontrado el día,
el que busca los colores del
crepúsculo
quizás en la vana esperanza
de alimentar sus utopías,
se dio cuenta que la gaviota
peregrina
se había convertido en poesía.
Ediciones Biblioteca Popular “Juan Carlos Dávalos”
84
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
LUGARES
Hay lugares que nos marcan para
siempre.
Que nos habitan permanentemente
con aires de nostalgias y
grandes
acontecimientos.
Lugares misteriosos,
susurrantes,
festivos y tenebrosos.
Dicharacheros, silenciosos.
Teocráticos y pecaminosos.
Allí habitan los fantasmas de
grandes
momentos.
Un trabajo, el primer beso,
helados, la pizza compartida
un gol de baldío, la primera
escuela,
el primer cigarrillo, un pariente
velado.
Lugares que murmuran.
Que taladran nuestro tiempo
y como jinetes misteriosos
cabalgan los recuerdos.
85
Lugares
Miguel Angel Cáseres
A esos lugares regresamos de tanto
en tanto
para convertirlos en espejos
donde nos miramos un buen rato
pidiéndoles nos devuelvan
esos viejos retratos.
Así nos damos cuenta
que algunos cambiaron de rostro
como también hemos cambiado
nosotros.
Desde esos lugares
partimos buscando el regreso.
Ediciones
Biblioteca Popular "Juan Carlos Dávalos"
86
ENTRE EL AMOR y
Otros poemas Miguel
Angel Cáseres
EL
CELEBRANTE
En la selva, en medio de
soledades,
monte adentro y también en los
medanales
el hombre siente el grito y pega
el brinco
cuando los coyuyos dicen que es
tiempo de
carnavales.
Se introduce en el seno de las
mingas
emprende el camino hacia los
algarrobales
y en la Tacu-Pallana espera
silenciosamente
la hora de la Pilla-Jacica para
beber desorbitadamente
el semen de las vainas mientras su
caja bien templada
le hace bellaquear el alma al
compás de una copla
vagabunda.
A partir de entonces ya no es el
mismo. No conserva
ni
apellido
deja de ser Juan Silencio para
llenarse de alborozo
se recuesta mansamente en el tibio
lecho de la tarde
y se deja naufragar en el morado
mar de un manso
vino.
87
El Celebrante
Miguel Angel Cáseres
Rompe las riendas que lo sujetan a
lo cotidiano
transformado en chúcaro soñador y
orejano de
caminos
se chupa el carnaval hasta
amanecer rodando en un
profundo alarido
y es una colorida hoja del otoño
que no tiene puerto ni
destino.
Las mujeres ven pasar al Quijote
enharinado, errante
y vagabundo
sembrador de amores pasajeros,
llevando a la rastra
su propio mundo.
Mientras el viento le hace flamear
su pañuelo fiestero
colorido y compañero en la
garganta del cantor
cabalga rozagante hacia el
miércoles de cenizas
para enterrar su tiempo celebrante
y carnavalero.
Así como ha venido se marcha
despacito.
Su figura, allá lejos, parece que
se arqueara
y cuando se lo traga la distancia
y el camino
solloza una guitarra, mujer
abandonada,
que se refugia en el huérfano vino
que ha quedado herido
desparramándose en la mesa
del olvido.
Ediciones Biblioteca Popular "Juan
Carlos Dávalos"
88
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
BIBLIOTECA PROVINCIAL
Señora.
Madre.
Parturienta de voces empolvadas.
Que esperan.
Que
gritan.
Pasillos con fantasmas talentosos.
Centenario alarido de utopías.
Todavía esperas y sueñas
que habrá un mañana
con habitantes de ojos gastados
de tanto caminar los socavones
con páginas que cuentan
batallas
libradas en fantasiosas madrugadas
donde un batallón de combatientes
armados de escudos de papel,
y mortíferas lapiceras
son capaces de salir triunfantes
cuando enfrentan al monstruo de
cien cabezas
alimentado con los restos de
ignorantes
que sucumbieron ante el canto de
sirenas
que murieron sin saber que el
parte de victoria
se escondía en los anaqueles de tu
vientre.
Después de tanto tiempo y tinta,
forjaste tu propia primavera.
Muchacha bella. Candorosa
princesa.
A tu balcón converge muchedumbre
para traerte la rosa portadora de
ternura
que esperará el paso de los
tiempos
acunada y disecada en el corazón
de unos de tus libros.
89
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
DECADENCIA
El hombre ha llegado
a tocarse los pies con la lengua.
Ahora siente el salobre gusto de la angustia
que le recorre los espacios mas
íntimos
hasta llegarle a la conciencia
donde se transforma
en una enloquecida boa que le come
una a una
las mentiras que fue engendrando
durante toda
su existencia.
El hombre ya no es el lobo del
hombre
porque hasta eso se ha comido.
Embobado en la parafernalia de su
miserable
riqueza material, es ahora cuando siente
que lo asfixia el lodo se su
propia pobreza.
La palabra ha quedado
soterrada en los mas
oscuros socavones de un tiempo globalizado
mientras su emisor se enrostra y
se arrastra
en el turbio lodo que enchastra su
dignidad y su
destino
90
Decadencia
Miguel Angel Cáseres
La profecía se ha cumplido. Todo
ha vuelto hacia el
origen.
Trogloditas del cemento,
computadora en mano,
marchan
sobre la huella cavernaria.
La auto- extinción esta en camino.
Difícilmente encuentre otra arca,
pues la madera se ha podrido.
Habrá un largo silencio. Quietud de angustiosa
espera.
Y cuando las nueve lunas hayan
florecido
rompiendo la carcaza para que
rebrote el espécimen,
sabrá si el monstruo se ha
reencarnado
o ha nacido el hombre nuevo.
Ediciones Biblioteca Popular "Juan Carlos
Dávalos"
91
ENTRE EL AMOR y Otros poemas Miguel Angel Cáseres
DESCUIDO
Es tarde de marzo y llueve
la palta pareciera estar mas
lejos.
Entre el espejo de agua y sus hojas
la lluvia tiene un sonido a
frituras.
Los tejados adquieren un color
naranja.
En
poco tiempo el vendaval de aguas
calma su furia, desaparece el gris
circundante
y todo adquiere un brillo como si
hubieran
encendido la luz sobre un gran
escenario.
Y me doy cuenta que no me había
dado cuenta
que, como una bendición de Dios,
todavía en mi tierra, a pesar del
cemento,
se puede escuchar el alborozado
canto de los
pájaros
que me hacen testificar que alguna
vez
esto fue un paraíso que no supimos
cuidar.
Ediciones Biblioteca Popular "Juan Carlos Dávalos"
92
INDICE
Prólogo
MEMORIA
Pedido........................................................................... |
5 |
Destino
......................................................................... |
6 |
Mañana ......................................................................... |
7 |
SENTIMIENTOS
Hijos.............................................................................. |
8 |
Tierra
............................................................................ |
9 |
El Comparsero............................................................... |
10 |
Lágrimas........................................................................ |
12 |
Amor.............................................................................. |
13 |
Los Reyes Magos........................................................... |
15 |
Hermanos....................................................................... |
16 |
El último
desembarco..................................................... |
18 |
Cae la nieve.................................................................... |
20 |
Tú................................................................................... |
22 |
El Ramo de
Novia.......................................................... |
24 |
Quince Ternura.............................................................. |
26 |
Señor.............................................................................. |
27 |
HOMENAJE
Duda............................................................................... |
29 |
Locura y Despedida....................................................... |
30 |
Tiempo............................................................................ |
32 |
Entrega........................................................................... |
33 |
Versos............................................................................ |
35 |
Divagues........................................................................ |
36 |
ENTRE EL AMOR Y OTROS POEMAS
Puna
Salteña................................................................. |
38 |
La Partida del
Poeta....................................................... |
40 |
Desafío........................................................................... |
42 |
No me
Explico................................................................ |
44 |
Anhelo............................................................................ |
46 |
Distancia......................................................................... |
47 |
Artabán........................................................................... |
48 |
Misterio........................................................................... |
51 |
Coplas............................................................................ |
52 |
La
Chacarera.................................................................. |
56 |
Aquella
vez..................................................................... |
58 |
Juancito de
Embarcación............................................... |
59 |
Semblanza de un Grande.............................................. |
62 |
La Arganera.................................................................... |
65 |
El Vuelo de la
Paloma.................................................... |
66 |
Pachamama................................................................... |
67 |
Morir Jugando................................................................ |
69 |
Fantasmas...................................................................... |
70 |
Trinos.............................................................................. |
72 |
El Poncho....................................................................... |
73 |
Mientras
Llueve............................................................. |
75 |
Dicen que...
................................................................... |
76 |
Los Años........................................................................ |
79 |
Retirada......................................................................... |
81 |
La
Muerte....................................................................... |
82 |
Mamá Josefa.................................................................. |
83 |
Lugares.......................................................................... |
85 |
El
Celebrante.................................................................. |
87 |
Biblioteca Provincial....................................................... |
89 |
Decadencia.................................................................... |
90 |
Descuido........................................................................ |
92 |
OTRAS
OBRAS DEL AUTOR
EDITADAS:
-
Anaqueles de la
Liberación. 1985
-
Raíces de Juan
Calchaquí. 1988
-
Memoria. Poemario.
1993
-
Sentimientos.
Poemario. 1994
-
El Último Poema.
Poemario. 1997
-
Homenaje. Poemario.
1999
-
Historia del
Carnaval Salteño. Tomo 1 –Periodo 1864-1950.
SIN EDITAR:
-
Aportes para un acercamiento
a la Historia de Salta.
-
Historia del
Carnaval Salteño
Tomo II –
Periodo (1951 – 1964)
Tomo III –
Periodo (1965 – 1974)
Tomo IV –
Periodo (1975 – 1984)
Tomo V –
Periodo (1985 – 1994)
-
“300 preguntas y
respuestas sobre el Carnaval Salteño”.
-
Es permanente
colaborador de diarios, semanarios y revistas salteñas y nacionales.
Desde el año 2003 el autor se
desempeña como:
-
Coordinador General
de Bibliotecas y Archivos de la Provincia de Salta.
-
Delegado
Gubernamental ante la CO.NA.BI.P.
-
Director Ejecutivo
del SIPADA (Sistema Provincial de Administración de archivos)
Directivos
de la de la Biblioteca Popular
“Juan
Carlos Dávalos”
Vicepresidente: Casimiro,
Héctor Abel
Secretaria: Casimiro, Patricia Karina
Prosecretaria: Borcosky, Juana
Tesorera: Aguirre, Norma Ramona
Pro-tesorera: Cayo, Ramona Elisa
Vocal
Titulares:
Ríos, Miriam del Valle
Rueda, Daniela del Valle
Cruz, Ignacio
Vocales
Suplentes:
Cruz, Martín
Luciano, Marta
Tapia, Patricia
Alfaro, Alberto
Órgano
Fiscalización:
Lic. Gutierrez, Carlos Miguel
Prof. Arias, Clara del Huerto
Prof. Cáseres, Fernando G.
Bibliotecario Profesional:
Yapura, Hugo Enrique Alberto
Director de la Esc. de Ajedrez: Prof. Carlos Dante Villagra
Directivos
de la Biblioteca Popular
Infantil
“Antonia Cáseres”
Director
Fundador-Bibliotecario Profesional: Palavecino,
Diego
Directora Periodo 2000-2002: Prof.
Sardina, Sara O.
Directora Periodo 2002-2004: Prof. Arias, Clara del Huerto
La
Biblioteca Popular “Juan Carlos Dávalos”, agradece la colaboración a la AGREMIACION
DOCENTE PROVINCIAL (A.D.P.), que
hizo posible la impresión de la tapa de este libro.
Se terminó de imprimir
en el mes de Enero de 2004. 2ª ed.
en el Centro de Soporte
Tecnológico de la
Biblioteca Popular “Juan C.
Dávalos”.
10 de Octubre Nº 551- Tel. (0387)4314571
E-mail: [email protected]
A4404FRK – SALTA- ARGENTINA